La Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Protección Ecológica y Cambio Climático, analizará y dictaminará la iniciativa con proyecto de decreto presentada por las diputadas del PVEM, Teresa Ramos Arreola y Alessandra Rojo de la Vega y a la que se suscribieron los legisladores Leticia Varela, Maricela Zúñiga y Norberto Sánchez (MORENA),así como Sandra Vaca (PRI).

La Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Protección
Ecológica y Cambio Climático analizará y dictaminará la iniciativa
con proyecto de decreto de las diputadas Teresa Ramos Arreola y
Alessandra Rojo de la Vega

Al fundamentar su instrumento legislativo la legisladora Alessandra Rojo indicó que actualmente existe una considerable cantidad de empresas que se benefician de la existencia de la fauna doméstica.

“El mercado de mascotas vale millones de pesos y se visualiza que todo irá en aumento. En nuestro país es de aproximadamente 9 mil 536 millones de pesos y se calcula que 7 por ciento del mercado de especies es dedicado al comercio de animales vivos, lo que es cercano a una cifra
de 667.52 millones de pesos al año”, aseveró.

Sin embargo, las condiciones en las que se encuentran resguardados en los establecimientos no es muy conveniente, tal como denunció el diario Milenio el pasado 24 de junio de 2015, “en relación a que en Pachuca integrantes de la Asociación Hidalguense para la Protección de los
Animales denunciaron, a través de videos que difundieron en redes sociales, tres casos de maltrato de especies”.

Implantar que para la estancia de los animales en instalaciones de resguardo los establecimientos mercantiles deberán
atender sus necesidades básicas de bienestar

Es por lo que se pretende reformar diversas disposiciones de la Ley de Protección a los Animales de la Ciudad de México para modificar los lineamientos que norman la venta de seres sintientes.

Entre los que destacan: privilegiar que antes de adquirir un animal, mediante compra o adopción, se privilegie el uso de medios remotos o la utilización de herramientas tecnológicas que eviten el contacto físico directo entre el animal y el público interesado en su adquisición; implantar que para la estancia de los animales en instalaciones de resguardo los establecimientos mercantiles deberán
atender sus necesidades básicas de bienestar, así como instituir que los establecimientos dedicados a su venta y/o adopción garanticen su protección y les aseguren un trato digno y  respetuoso.