La pesca de todas las especies de camarón en el país, en aguas interiores y marinas, bahías y altamar, es una tradición que reanima los campos pesqueros, las comunidades rurales, los pueblos indígenas y los puertos
Arranca captura de camarón de altamar 2024-2025
Arrancó oficialmente la temporada de capturas de camarón de altamar 2024-2025 en el litoral mexicano del océano Pacífico, incluido el Golfo de California, y nuestras y nuestros tripulantes de barcos camaroneros salieron a la búsqueda de una las especies marinas con mayor valor económico.
A las 06:00 horas de este jueves 17 de octubre, como lo estableció el Acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), se levantó la veda temporal del camarón en aguas marinas de jurisdicción federal del Pacífico, desde la frontera con Estados Unidos de América y hasta los límites con Guatemala, incluido el Golfo de California.
La pesca de todas las especies de camarón en el país, en aguas interiores y marinas, bahías y altamar, es una tradición que reanima los campos pesqueros, las comunidades rurales, los pueblos indígenas y los puertos.
De acuerdo con cifras del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), en 2023 se contabilizaron 244 mil 043 toneladas de camarón con valor de 25 mil 243 millones de pesos.
Su captura favorece directa e indirectamente al desarrollo y bienestar de cientos de familias mexicanas, quienes desde hoy realizaron las maniobras de salida desde los puertos.
También, reactiva la actividad comercial, cuyo beneficio se refleja desde los abarrotes hasta la generación de mano de obra y cientos de divisas por ser una industria de exportación.
Además de externar sus mejores deseos para que tengan buen viaje y una pesca productiva, el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, vela por la seguridad de las tripulaciones a través del Sistema de Monitoreo Satelital de Embarcaciones de la Conapesca, conectado directamente con la Secretaría de Marina y autoridades de rescate y auxilio.
Las y los productores mexicanos del crustáceo son fuertes, competitivos y un verdadero orgullo para todo el país porque su pesca aporta en gran medida a la soberanía alimentaria, al autoconsumo, al bienestar familiar y a la disminución de la pobreza.