Los humanos captamos sonidos en un rango aproximado de 20 Hz a 20 kHz, mientras que los perros detectan frecuencias entre 40 Hz y 60 kHz
Los perros escuchan hasta 4 veces más que nosotros
En las fiestas patrias, los fuegos artificiales simbolizan alegría y pasión, pero pueden ser una experiencia aterradora para nuestros compañeros caninos. Bye Bye Friend invita a conocer cómo nuestras mascotas perciben los estímulos acústicos y qué podemos hacer para protegerlos.

Los humanos captamos sonidos en un rango aproximado de 20 Hz a 20 kHz, mientras que los perros detectan frecuencias entre 40 Hz y 60 kHz, dependiendo de la raza y edad, lo que les permite escuchar sonidos y ultrasonidos inaudibles para nosotros. Por naturaleza, están dotados con una mayor capacidad para percibir sonidos hasta cuatro veces más lejos que los humanos, especialmente en frecuencias altas.
Es por ello, que el ruido de los fuegos artificiales provoca en los perros comportamientos de huida, temblor, jadeo excesivo, hiperalerta y hasta salivación abundante. Se estima que entre el 40 % y el 50 % presenta reactividad al ruido, y el 92.9 % reaccionan con miedo.2,3
Nuestros compañeros de cuatro patas están escuchando mucho más de lo que podemos imaginar, y sufriendo por ello. Protegerlos durante las fiestas no es solo un gesto de cariño, sino nuestra responsabilidad como tutores. Celebrar a México con ellos, implica también ocuparnos de su bienestar.
Los fuegos artificiales pueden alcanzar picos de 190 decibeles, muy por encima del umbral de daño auditivo en humanos (alrededor de 85 dB), lo que puede provocar pérdida auditiva e incluso tinnitus persistente en perros.

Ante ello, Bye Bye Friend te comparte algunas recomendaciones:
- Acondiciona un refugio acogedor con su cama y juguetes.
- Acompáñalo durante el tiempo de mayor actividad pirotécnica.
- Proporciónale agua fresca y comida.
- Asegúrate de que porte su placa con datos de contacto, en caso de que salga corriendo por el miedo al ruido.
Porque sus huellas no se borran, conocer sobre su sensibilidad al sonido, nos ayuda a prevenir su estrés.