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La burocracia a nivel de calle son aquellos servidores públicos que se caracterizan por interactuar cotidianamente con ciudadanos

Analizan gestión del personal hospitalario

Con la llegada de la pandemia por COVID-19, el personal de salud se enfrentó a la incertidumbre derivada de una enfermedad desconocida, y al mismo tiempo, se enfrentaron al desafío de la implementación de políticas públicas diseñadas para enfrentar la saturación hospitalaria.

Analizan gestión del personal hospitalario
Para realizar esta investigación, los autores entrevistaron al personal médico que se encontraba en primera línea atendiendo a los pacientes con COVID-19

En el artículo Gestión hospitalaria de la pandemia en la Ciudad de México. Un análisis desde el enfoque de burocracia a nivel de calle, Oliver Meza y Elizabeth Pérez Chiqués, profesores investigadores titulares de la División de Administración Pública, junto a Sergio Campos González y Samanta Varela, egresado y estudiante del Doctorado en Políticas Públicas (DPP) del CIDE, respectivamente, describen cómo se llevó a cabo la administración del personal hospitalario —como burócratas a nivel de calle— durante la pandemia por COVID-19.

La burocracia a nivel de calle son aquellos servidores públicos que se caracterizan por interactuar cotidianamente con ciudadanos. Esta investigación analizó el cambio de roles y el proceso en la toma de decisiones que enfrentó el personal hospitalario de primera línea contra COVID-19, a raíz de la llegada de la pandemia.

“Este artículo es parte de un estudio más amplio, que busca entender las dificultades, las respuestas de política pública del personal de primera línea COVID-19: médicos, enfermeras, gerentes, supervisores y directores de hospitales. Nos interesa saber como es su día a día, como han reaccionado, no solo a la pandemia, sino también a las políticas públicas que se han implementado a raíz de la pandemia” comentó la Dra. Pérez.

Para realizar esta investigación, los autores entrevistaron al personal médico que se encontraba en primera línea atendiendo a los pacientes con COVID-19. Estas entrevistas se realizaron vía plataformas electrónicas como Zoom a médicos expertos, quienes después de ser entrevistados compartían el contacto de sus demás compañeros.

Esta respuesta favorable de parte del personal de salud se debió, en gran medida, a la carga emocional que tenían, pues la entrevista sirvió para sentirse escuchados y sacar lo que sentían: “parecía que había una necesidad por parte del personal hospitalario de decir qué es lo que estaba ocurriendo”, expresó el Dr. Meza.

Uno de los principales retos que enfrentaron los investigadores del CIDE fue ajustarse a los horarios de los entrevistados, en diversas ocasiones tuvieron que reagendar las entrevistas debido a las jornadas laborales que tenía que cubrir el personal médico. Esto, sumado a que muchos de ellos se encontraban infectados con COVID-19 o recuperándose del mismo.

La jerarquía y los roles del hospital perdieron sentido

Uno de los principales hallazgos que tuvo la investigación fue el cambio de jerarquías. Normalmente, en los hospitales, el personal médico cumple con determinados roles de acuerdo con su conocimiento y experiencia, permitiendo organizar la vida y la toma de decisiones; sin embargo, esto cambió con la pandemia; los roles dentro del hospital dejaron de tener sentido debido a que el COVID-19 era una enfermedad poco estudiada y los médicos no conocían mucho sobre ella.

Por otro lado, doctores de otras especialidades tuvieron que atender la demanda de enfermos que llegaba a los hospitales. Sergio mencionó que, dentro de los hospitales, existía personal de otras especialidades como oncólogos o radiólogos encargándose de procesos como la intubación. Estas vivencias implicaron un cambio de rutina dentro del personal de salud.

“Las jerarquías se rompen, pero también se rompen las paredes que separan a las diferentes disciplinas.” mencionó el Dr. Meza.

La política pública y la toma de decisiones

Aunado al cambio de roles, el personal médico se enfrentó a la necesidad de implementar las políticas públicas diseñadas desde las autoridades de salubridad, así como la inviabilidad de ejecución por las condiciones locales y el contexto que vivían los médicos y enfermeras.

“La existencia de protocolos o reglas de los pacientes al ingreso no siguió las reglas formales, sino que fueron a partir de las decisiones al momento y además de los recursos que tenían ellos. Una de las cosas que encontramos es que este personal no hace caso de los protocolos formales que establece el gobierno federal, pero tiene un conjunto de reglas profesionales que le permite tomar decisiones adecuadas en el momento” comentó el Sergio Campos, egresado del DPP.

A pesar de que en muchos hospitales de la Ciudad de México se pudieron llevar a cabo los procesos de acuerdo a las políticas implementadas, en algunos hospitales de otros estados esto no fue posible debido a los recursos y personal con el que se contaba.

Políticas como la reconversión hospitalaria cambiaron el contexto de los empleados en los hospitales, ya que doctores de otras especialidades, que nunca habían trabajado con pacientes vivos o que nunca habían estado en el área de urgencias, tuvieron que trabajar con pacientes enfermos de COVID-19.

De igual forma, debido al alta demanda en los hospitales, surgió la necesidad de velar por los recursos, ya que no existieron los suficientes para las personas que llegaban a los hospitales. Esto provocó que el personal de salud comenzara a tomar decisiones diferentes a las que normalmente tomaba, afectando la estructura de las políticas diseñadas. La Dra. Pérez mencionó que cuando no se pone atención a los recursos, las políticas públicas tienen una alta posibilidad de fallar.

De acuerdo con los investigadores, la pandemia ha hecho más evidente la importancia que tienen los marcos éticos y profesionales en las decisiones del personal hospitalario. Además, es necesario poner atención a los burócratas a nivel de calle para entender su toma de decisiones y realizar políticas públicas de acuerdo a sus necesidades.

Oliver D. Meza es Doctor en Política Pública con énfasis en análisis institucional en CIDE, y estudió un MPA en la London School of Economics and Political Science. Sus líneas de investigación académica incluyen temas de gobierno local y políticas públicas, y ha participado en varios proyectos de investigación aplicada.

Elizabeth Pérez Chiqués es Doctora en administración y políticas públicas en la Universidad de Albany en Nueva York. Cuenta con experiencia en la administración de programas estatales y federales en el Gobierno de Puerto Rico y es co-fundadora de Abre Puerto Rico. Sus principales agendas de investigación están centradas en la corrupción gubernamental y en la gestión de los recursos humanos.