Como tutor de un peludo de cuatro patas, sabemos que te preocupas mucho por sus cuidados, pues al ser otro miembro de tu familia, su salud y bienestar también son muy importantes para ti. Si bien pasar tiempo de calidad con él, para jugar y fomentar su actividad física, así como las visitas frecuentes al veterinario son fundamentales, a menudo, nos olvidamos de algunos puntos clave en su salud; tal es el caso, por ejemplo, de la salud de sus huesos y articulaciones.

Afortunadamente, existen diversas acciones que podemos implementar y que son muy sencillas para que nuestro perro tenga no solo huesos sino músculos sanos y fuertes. Muchas de estas acciones comienzan desde la alimentación que le damos, ya que a través de ella es que recibe los nutrientes necesarios para su adecuado mantenimiento.

Al igual que nosotros, nuestros perros pueden desarrollar diversas enfermedades si no reciben las vitaminas y minerales necesarios, ya que varios de ellos ayudan a fortalecer los huesos. Por ello compartimos algunos consejos para que tu mejor amigo tenga huesos y músculos fuertes y sanos.

Cuidados desde el primer bocado

Parte de ser un padre responsable de un perrito, es brindarle una dieta nutritiva y balanceada que vaya de acuerdo con su etapa de vida y su tipo de raza, ya que las necesidades nutricionales de un cachorro, por ejemplo, no son las mismas que las de un adulto o las de uno que está en su etapa senior, y estas también varían entre una raza pequeña o una raza gigante.

Como ya se mencionó, los huesos requieren de ciertos minerales y nutrientes, y entre las más importantes se pueden destacar la Vitamina D, la cual ayuda a la correcta absorción del calcio, el mineral más importante para mantener una buena salud ósea. Si el alimento que le damos, también incluye Vitamina K y Magnesio, le ayudarán, en gran medida, a tener huesos sanos.

Las proteínas también juegan un papel muy importante ya que el no administrar la suficiente cantidad de proteínas puede tener un efecto negativo en sus huesos. Entre las proteínas que son ideales para nuestro amigo de cuatro patas, se encuentran aves como pollo, pato o pavo; carnes como el cordero; pescados como el atún o el salmón; entre otros.

Afortunadamente, se ofrecen diversos productos que incluyen en sus fórmulas carnes de res y/o pollo y vitaminas A, D, E y K, lo que ayudan a cubrir estas necesidades. Además, también incluyen Life Defense, desarrollado con ingredientes que le procuran piel y pelaje saludables, favoreciendo a huesos y músculos fuertes, así como una óptima digestión.  

Actividad física constante y cuidado del peso

Sin importar el tamaño o el tipo de raza, todos los perros necesitan realizar actividad física, ya que no solo les ayuda a mantenerse en forma, sino felices, pues a través de ella liberan estrés y ansiedad. Desde luego, la intensidad y frecuencia dependerá, entre otras cosas, de su etapa de vida y tamaño de raza.

Además, tal y como sucede con nosotros, el sobrepeso también puede traer consecuencias negativas en los huesos de los miembros más peludos de nuestra familia ya que el exceso de peso ejerce demasiada presión sobre huesos y articulaciones, haciéndolos más débiles con el tiempo; esto, sin mencionar que limita su movilidad para realizar sus actividades diarias. Lo mejor es acudir al veterinario quien te podrá orientar sobre ejercicios que vayan de acuerdo a sus necesidades, así como de los cuidados específicos para que mantenga un peso sano.

Músculos de envidia

Además de alimentarlo nutritiva y balanceadamente, también es muy importante tomar en cuenta la calidad de las fuentes proteicas, ya que aquellas que son de origen animal, por ejemplo, tienen una mayor digestibilidad y aprovechamiento y le ayudarán a tener un mejor desarrollo muscular.

Como sabemos, existen diversos tipos de ejercicio, sin embargo, una de las mejores formas de lograrlo es a través de las caminatas o de los trotes, ya que éstos ayudan a que los músculos se estiren y contraigan de acuerdo con los movimientos del perro mientras los realiza, propiciando el crecimiento de las fibras musculares. Para realizar estas actividades, lo más aconsejable es utilizar un arnés en lugar de un collar, ya que el arnés distribuirá de mejor manera el peso en caso de que nuestra mascota lleve a cabo algún tirón.

Si tu mejor amigo no está muy acostumbrado a realizar alguna de estas actividades o si apenas comienza a realizarlas, entonces lo más adecuado será iniciarlas de forma gradual, añadiendo algunos minutos cada día durante algunas semanas hasta completar, idealmente, al menos 30 minutos diarios. Es muy importante que tenga acceso a agua fresca y potable durante y después del ejercicio, ya que la hidratación ayuda a prevenir daños en los músculos.

Tener a un peludo de cuatro patas, no solo nos brinda muchas alegrías, sino que también conlleva múltiples obligaciones y una gran responsabilidad ya que debemos brindarle los cuidados necesarios para cubrir sus necesidades. Demuestra al ganador de tu familia tu Amor Incondicional® y ayúdalo a mantener huesos y músculos fuertes y bien desarrollados, ya que esto fundamental para que tenga una buena calidad de vida.

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