"Nuestros vecinos silvestres no son una amenaza" Lanza campaña para explicar que la coexistencia con las especies silvestres es posible si se actúa con respeto
Convivir responsablemente con la fauna silvestre urbana
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) lanzó “Vecinos silvestres”, una campaña informativa dirigida a la ciudadanía para promover la convivencia responsable con especies silvestres que aparecen, habitan o transitan en zonas urbanas, como el tlacuache, el coyote, la tarántula mexicana, el mapache y el cacomixtle.

Estos animales forman parte de los ecosistemas locales, cumplen funciones ecológicas importantes, como el control de plagas, la dispersión de semillas y el equilibrio de las comunidades naturales, y no representan peligro para las personas. Es importante que la ciudadanía respete a estos ejemplares y evite el contacto directo con ellos.
La campaña busca concientizar a la población para que no dañe, persiga ni adopte como mascotas a estos ejemplares de fauna silvestre, pues su captura puede afectar su salud, poner en riesgo a las personas y constituir una infracción a la normativa ambiental.
Dentro de los animales que se encontrarán en dicha campaña están el tlacuache (Didelphis virginiana), único marsupial nativo de la Ciudad de México; el coyote (Canis latrans) mamífero carnívoro sumamente adaptable tanto en hábitat como en hábitos alimenticios; la tarántula mexicana de cadera roja (Tliltocatl vagans), que no es considerada de importancia médica y está protegida por la legislación mexicana; el mapache (Procyon lotor), que se adapta bien a vivir en áreas urbanas donde puede alimentarse de residuos de alimentos y desperdicios domésticos; y el cacomixtle (Bassariscus astutus), pequeño mamífero nocturno y omnívoro que ayuda a dispersar semillas.
En caso de encontrarse con alguno de estos ejemplares, estas son las medidas que se deben adoptar:
- Mantener la distancia. No intentar capturarlo ni manipularlo, y permitir que se aleje por sí mismo.
- Evitar alimentarlos. Cambiar su dieta o atraerlos deliberadamente puede alterar su comportamiento.
- No adoptarlo como mascota. La vida silvestre no está adaptada a la vida doméstica; mantenerla en casa puede producir sufrimiento y problemas sanitarios.
- Dar aviso a la Profepa. Ante la presencia de un animal silvestre en riesgo o en zona urbana, hay que comunicarse con la oficina de representación estatal para recibir atención. Si se trata de crías, evitar recogerlas y dar aviso inmediato en caso de que la madre esté muerta. La Procuraduría coordinará su rescate, atención veterinaria y reubicación segura.
- Vacunar y desparasitar a perros y gatos, los ejemplares silvestres son susceptibles a las enfermedades de los animales domésticos.
La Procuraduría reitera la importancia de la corresponsabilidad social: preservar la fauna silvestre requiere la participación de la población, autoridades y organizaciones. Por ello, la Profepa trabaja junto con autoridades estatales, municipales y organizaciones civiles para fortalecer las acciones de rescate, atención y reubicación de ejemplares que ingresan a zonas urbanas, siempre bajo protocolos de bienestar animal y conforme a la normatividad vigente.
Con esta campaña, se busca fomentar la empatía, conocimiento y tolerancia sobre las especies silvestres que habitan en los entornos urbanos, recordando que matar, capturar o retener fauna nativa es ilegal y genera desequilibrios ambientales. La Profepa invita a la ciudadanía a ser parte de la conservación: nuestros vecinos silvestres no son una amenaza.

