“En la actual administración se ha debilitado la vigilancia del hábitat de la vaquita marina, así como el presupuesto en esta materia, por el contrario, se incrementó el tráfico ilegal del pez totoaba”, aseguró Alejandro Olivera, representante en México del Centro para la Diversidad Biológica.

En entrevista con Prensa Animal, afirmó que “la población de la vaquita marina se calcula entre 6 a 19 individuos, sólo la amenaza de sanciones por parte de Estados Unidos fue lo único que ha obligado al gobierno de México a implementar algunas medidas, que, sin embargo, tampoco han sido implementadas”.

“El recorte presupuestal, por parte del gobierno mexicano, repercutió en la disminución del número de inspectores de Profepa, lo que bajó la capacidad de operación en la vigilancia del Alto Golfo”, expuso Alejandro Olivera.

“La corrupción no ha desaparecido, pues aún sigue el comercio ilegal del pez totoaba que llega hasta China, lo que implica la existencia de toda una red de corrupción”, explicó Olivera

Informó que  “las ONGs llevan, hasta el momento aproximadamente 35 kilómetros de  redes fantasma, al tiempo que los científicos llevan a cabo el monitoreo de vaquitas marinas a través de sonares, pero esto es gracias a las iniciativas de la comunidad científica y las mismas organizaciones civiles”.

Por otra parte, “el recorte de apoyos a las ONGs también ha debilitado la lucha en favor de la conservación de la vaquita marina”, dijo el especialista.

Sobre sus perspectivas para el próximo año, Alejandro Olivera precisó que “la situación para la vaquita marina se vislumbra grave, porque no hay inspectores, sin presupuesto, además de que no se han publicado las reglas de operación”.

Dijo que, “los pescadores no cuentan redes suriperas, las embarcaciones usan sistema satelital, pero el gobierno mexicano no ha pagado este servicio, por lo que muchos pescadores ya han devuelto estos aparatos”.

“Las embarcaciones usan el chinchorro camaronero, redes agalleras y totoaberas, lo que ocasiona que ballenas, lobos marinos, delfines, tiburones, tortugas entre otras especies mueran víctimas de estas redes”, dijo.

Finalmente sostuvo que “el gobierno mexicano no ha publicado las reglas de operación para la zona de cero tolerancia, en donde se concentra la vaquita marina”.