Organizaciones conservacionistas demandaron a la administración de Trump para forzar una decisión atrasada de sancionar a México por su pesca y comercio ilegal que está causando la extinción de la vaquita marina.

El gobierno de EE.UU. ha ignorado la petición legal de las organizaciones desde 2014 donde se solicitan sanciones como la prohibición de todas las importaciones de productos pesqueros de México, en virtud de una ley estadounidense llamada la Enmienda Pelly.

La demanda, presentada por el Centro para la Diversidad Biológica y el Instituto de Bienestar Animal en contra del Departamento del Interior de los Estados Unidos, expone que la vaquita marina se enreda y se ahoga en artes de pesca mexicanas utilizadas para atrapar a la totoaba, un pez en peligro de extinción.

Con solo 10 vaquitas restantes, expertos científicos internacionales advierten que si se continúa permitiendo la pesca y comercio ilegal, se está «condenado a la extinción» a la pequeña marsopa.

«El gobierno de México todavía está sentado de brazos cruzados mientras la vaquita marina muere en las redes de pesca», dijo Sarah Uhlemann, directora del programa internacional en el Centro para la Diversidad Biológica.

 “Hemos intentado el apoyo, hemos intentado la diplomacia, pero estamos cerca del final de la vaquita. La presión económica es necesaria para obligar al gobierno de México a que finalmente reaccione y así detener la extinción de la vaquita», agrega.

La ley mexicana prohíbe la pesca de totoaba, y su comercio está prohibido bajo la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies en Peligro de Extinción de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés) porque la totoaba está en peligro de extinción. Sin embargo, el gobierno de México ha fallado reiteradamente en hacer cumplir estas prohibiciones.

La demanda exige una «certificación» formal por parte del gobierno de los Estados Unidos de que la pesca y el comercio ilegal de totoaba en México viola y «disminuye la efectividad» del tratado CITES.

Si México está certificado, la administración de Trump puede sancionar al país al prohibir todas las importaciones de vida silvestre, incluidos los pescados y mariscos, en virtud de la Enmienda Pelly.

A principios de este año, los Estados Unidos prohibió las importaciones de camarones y otros productos del mar del hábitat de la vaquita en México bajo una ley diferente; una prohibición bajo la Enmienda Pelly expandiría esas sanciones.

«La demora del gobierno de Estados Unidos en responder a la petición es desmesurada y ha permitido que la vaquita se tambalee al borde de la extinción», dijo DJ Schubert, biólogo de vida silvestre del Instituto de Bienestar Animal.

 “La Enmienda Pelly proporciona una herramienta para obligar a México a detener la pesca ilegal y el comercio de productos pesqueros para salvar al mamífero marino más pequeño y en mayor peligro de extinción del mundo. Es hora de que la administración Trump ejerza su autoridad y aplique esta ley”, añadió.

A pesar del declive de la vaquita y el estado de peligro de la totoaba, México no ha podido detener la pesca y el comercio de la totoaba.

 En diciembre del año pasado, cientos de pescadores en aproximadamente 80 pequeñas embarcaciones fueron documentadas pescando ilegalmente totoaba en el hábitat de la vaquita en el Alto Golfo de California.

El gobierno mexicano aún no ha anunciado cargos en contra de alguno de los pescadores involucrados. En marzo, una de las últimas vaquitas restantes fue encontrada enredada y muerta en una red de pesca de totoaba.

Según los científicos, todas las redes de enmalle deben retirarse del hábitat de la vaquita para salvar a la especie de la extinción.