Este tipo de manifestaciones masivas no sólo muestran que los defensores de animales ya existen en el mapa de la política mexicana, y que los partidos, legisladores, agrupaciones, asociaciones y actores en lo individual, buscan hacerse presentes
Marcha animalista debe responder al derecho animal
Por Álvaro Cedillo Montes
La indignación acerca del maltrato a los animales no humanos ha motivado un panorama de anuncio de marchas y protestas que revindican a los derechos de los animales, se exige de los animales sean considerados como “seres sintientes” y sujetos de derecho.
Sin duda, el próximo día 25 de junio del 2023 va ser un día en que varias organizaciones se darán cita en el Monumento al Ángel de la Independencia y recorrerán la avenida Paseo de la Reforma y llegarán al Zócalo de la Ciudad de México, con pancartas, mantas y diversas expresiones denunciando casos como el de los animales asesinados con crueldad extrema, además de que los animalistas exigirán justicia.
Se espera sea una marcha multitudinaria, la cual, casualmente coincide con un anuncio que hará el presidente para reconocer los derechos de los animales como “seres sintientes” y que pueda ser incluido a nivel nacional, ya que a nivel Ciudad de México ya existe este reconocimiento desde administraciones pasadas las cuales fueron las que montaron los precedentes.
Es claro que casos como el del perrito “Benito” que fue muerto cruelmente en un cazo de aceite hirviendo, es un ejemplo del tamaño de presión social. Este tipo de casos, no solo requieren de una actuación rápida de parte de las autoridades en la aplicación de las leyes existentes, sino también son muestra de una sociedad que cada vez muestra su condena a este tipo de crímenes y exige un castigo no sólo con todo el peso de la ley sino con todo el peso de una verdadera voluntad de hacer justicia a los animales.
Este tipo de manifestaciones masivas no sólo muestran que los defensores de animales ya existen en el mapa de la política mexicana, y que los partidos, legisladores, agrupaciones, asociaciones y actores en lo individual, buscan hacerse presentes, pues ello implica estar presentes también en el marco del proceso electoral que ya arrancó y uno de los temas en las agendas en el de los animalistas.
Es importante recordar a los actores que estarán presentes en esta manifestación política, no pierdan el foco de que los animales son un tema no de política de intereses sociales, sino que significan un tema de sobrevivencia planetaria. Es necesario recordar que cada palabra que se use en la manifestación tendrá una repercusión política de cohesión o polarización y, que los animales no son sólo nuestros amados perros y gatos, sino que son todas las especies, animales en situación de zoológico, de granja y silvestres deben ser respetados.
Es importante que la marcha incluya en sus exigencias a todos los animales y solicite al gobierno actual que asuma la responsabilidad de cuidar a todas las especies, que no sacrifique animales solo porque no hay agua en las granjas, que no actúe ante el tráfico de animales, que asuma políticas de inclusión de los animales en los planes de gobierno a corto, mediano y largo plazo, porque los animales no son cosas , son sujetos que merecen respeto y deben tener derechos, como lo marcan los acuerdos internacionales.
De lo contrario la historia guardará cada acto y palabra que no cumpla con el verdadero fin de dar derechos y proteger a los animales.