por Eva Cajigas

Es posible que los adolescentes no lo sepan, pero cualquier persona adulta recuerda claramente que hace más de 20 años, los automóviles en la carretera solían atravesar una tormenta de insectos y los parabrisas terminaban llenos de sus cadáveres aplastados luego del viaje.

Actualmente parece genial salir a la carretera y terminar con el parabrisas limpio. ¿Pero esto no te hace pensar en nada? ¿A dónde se fueron los insectos? Algo probablemente no está bien…

Las investigaciones muestran que las poblaciones de insectos están en declive, y este entorno biológico puede verse más afectado de lo que pensamos. Un estudio concluyó que el 40 por ciento de los insectos están en declive y pueden desaparecer en los próximos años.

Las razones detrás de esta disminución incluyen asentamientos humanos que alteran los ecosistemas naturales, así como la deforestación y la conversión de hábitats, como los bosques nativos, en tierras de cultivo. También se utilizan en la agricultura productos químicos como herbicidas, fungicidas e insecticidas que han afectado tanto a los insectos y ácaros perjudiciales como a las abejas y otros insectos benéficos.

El cambio climático también juega un papel, especialmente en condiciones climáticas extremas como la sequía, que aumentarán en intensidad en los próximos años debido a actividades humanas.

Es bien conocido que el diseño aerodinámico de los actuales vehículos juega un papel importante sobre el impacto de los insectos en el parabrisas, sin embargo, el problema con los insectos va más allá.

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