De acuerdo con el Primer consenso para promover la salud y bienestar de las mascotas en México, especialistas en nutrición y salud animal alertaron sobre la relación que existe entre los alimentos que les proporcionamos y la posibilidad de que desarrollen algunos tipos de cáncer, desnutrición, obesidad, diabetes y cardiopatías, entre otras enfermedades.

En palabras del MVZ Ernesto Ávila, presidente de Grupo Amascota del Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y de la Nutrición Animal (CONAFAB), señala que, en su experiencia profesional en consultas veterinarias, “hay múltiples enfermedades por las que acuden perros y gatos a consulta y que son prevenibles si sus tutores cuidan y seleccionan adecuadamente el alimento”.

Algunas enfermedades comunes que pueden prevenirse con la alimentación son:

• Gastroenteritis: este padecimiento puede ocasionarse por múltiples factores, pero sin duda uno que puede ser prevenible tiene que ver con la caducidad de los alimentos y el buen estado de los mismos.

Recomendación: asegúrate que el alimento que ofreces a tus gatos este en buenas condiciones, guardado adecuadamente sin contacto con el ambiente previo a ofrecerlo, asimismo es importante validar la vigencia ya que eso será la diferencia para mantener sanas a nuestras mascotas.

•  Deshidratación: el agua es indispensable para garantizar el correcto funcionamiento en los órganos de cualquier ser vivo, y en los gatos no es la excepción. La falta de agua puede traer complicaciones renales graves y alteraciones en el metabolismo.

Recomendación: prueba con bebederos eléctricos en los que el agua no permanece estancada, ya que eso será un imán para que los felinos prueben el vital líquido. A la par, puedes complementar su dieta con alimento húmedo. En la actualidad hay diversas propuestas enlatadas que ofrecen aportes en vitaminas y minerales, además de que hay una gran variedad de sabores con las cuales tendrás opciones para ofrecer a tus mascotas.

• Diarreas: estas pueden presentarse por múltiples factores, sin embargo, uno de las causas comunes y prevenibles es el cambio de alimento, que en ocasiones puede ser abrupto por parte de los tutores.

Recomendación: al planear un cambio de alimento de los gatos debe ser gradual, empezando en cada administración de alimentos en combinar alimento actual por el nuevo, de tal manera que la primera proporción sea tres cuartos del alimento actual, por un cuarto del nuevo, posteriormente un medio del actual por un medio del nuevo, después un cuarto del actual por tres cuartos del nuevo, hasta que finalmente se haga el cambio total del alimento nuevo.

La alimentación de los gatos no es cosa menor, en la medida que haya tutores informados sobre su adecuada selección y administración, ellos tendrán una mejor calidad de vida.