La chacarera, ritmo y danza folclórica tradicional argentina, cuyo origen alude al galanteo y la coquetería entre una pareja de bailarines, se hizo escuchar por primera vez en México en una gran fiesta que reunió a músicos y bailarines de Argentina, Estados Unidos, Australia y nuestro país en el Festival Nacional: Desde Argentina nos iremos por el mundo sembrando la Chacarera.

En el Museo Nacional de Culturas Populares, músicos y bailarines mostraron la riqueza artística de esta expresión, considerada patrimonio cultural de Argentina, la cual nació a mediados del siglo XX en la provincia de Santiago del Estero. Esta danza criolla, con influencias de los quichuas y los migrantes afroantillanos, es una de las más tradicionales y antiguas del país.

El primer Festival Nacional de la Chacarera se llevó a cabo en 1971 en la provincia santiagueña, por iniciativa de Agustín y Carlos Carbajal, reconocidos músicos y promotores del folclor argentino. En esta ocasión, llegó por primera vez a nuestro país a través de la Casa de la Cultura Argentina en México y la Embajada de la República Argentina en México, con el apoyo de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas de la Secretaría de Cultura.

“La intención fue recrear uno de los festivales más importantes de Argentina, con el propósito de que se conociera la diversidad de manifestaciones artísticas y culturales que poseen las diferentes regiones de este país sudamericano. Quisimos comenzar con una expresión popular, por excelencia, la chacarera”, refirió en entrevista María Julia Rodríguez, vicepresidenta de la asociación civil Casa de la Cultura Argentina en México y una de las organizadoras del encuentro.

La también bailadora aseguró que eventos como éste “nos permiten conocernos desde adentro y dan la oportunidad de relacionarnos mejor con el otro. Nos interesa que la gente no se case con la idea de que Argentina es solamente tango y asado, tenemos mucho más que ofrecer hacia afuera; se trata de difundir y compartir entre todos nuestra cultura”.

Además de las presentaciones artísticas, los asistentes pudieron disfrutar de platillos típicos, expoventa de artesanías y talleres dedicados a explicar la diversidad de bailes tradicionales del país gaucho; cómo se baila una chacarera o cómo se elaboran las boleadoras, instrumento empleado en algunas danzas folclóricas como el malambo.

El festejo de esta expresión artística llama a la convivencia social, cuyas alegres y picarescas letras se acompañan de música de guitarra, bombo legüero, violín y acordeón. El festival fue apadrinado por el músico argentino José Luis Carbajal, uno de los principales promotores de la chacarera en su país y quien ha continuado con la tradición que le heredó su familia, fundadora del primer festival nacional y que ha dado a conocer este género musical y dancístico en otros países durante generaciones.

Provenientes de Sudamérica, llegaron la bailarina María Eugenia Díaz y la agrupación Javier y la del 30; además actuaron artistas argentinos radicados en México, entre ellos los músicos Juan Martín Medina, Damián Tuso y Bruno Valenti; así como la bailarina Laura Décima y la Compañía Malka.

Se sumó la presencia de mexicanos compenetrados con el folclor argentino, como la agrupación musical Los Pibes; el músico Martín Pérez; los bailarines Carlos Blanco y Fernando Torres, éste último integrante del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández. Desde Nueva York, se presentaron los bailarines Óscar Magallanes y Blanch Zeinoun, fundadores de la Escuela Chakaymanta, además del músico Justo Díaz, quien ha desarrollado su carrera artística en Australia.

“Los ritmos típicos latinoamericanos tienen muchas similitudes. La chacarera y algunas piezas de baile folclórico mexicano son muestra de ello, tanto en la coreografía como en la música”, aseguró María Julia Rodríguez.