Murat Hinojosa afirmó que el océano sustenta una economía que rebasa los 1.5 de billones de dólares anuales en sectores como la pesca, turismo, biotecnología, energía
Senado avala Acuerdo sobre el Derecho del Mar
Por unanimidad, con 100 votos a favor, el Pleno deL Senado de la República avaló el Acuerdo en el marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, relativo a la Conservación y el Uso Sostenible de la Diversidad Biológica Marina de las Zonas Situadas fuera de la Jurisdicción Nacional.

El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Alejandro Murat Hinojosa, señaló que el acuerdo que fue adoptado en Nueva York, el 19 de junio de 2023, y firmado por México en septiembre del mismo año, es un logro multilateral de los más importantes de las últimas décadas en materia de gobernanza oceánica, por lo que su relevancia no es menor, pues los estados del mundo acordaron dotar a la alta mar de un marco jurídico claro, vinculante y orientado a la equidad.
Aseguró que los océanos cubren más de 360 millones de kilómetros cuadrados, equivalentes al 72 por ciento de la superficie terrestre, los cuales son cuna de la vida, reguladores del clima global, fuente de alimento, transporte, comercio y generación del conocimiento científico, por lo que el mar es parte esencial de la vida cotidiana.
Murat Hinojosa afirmó que el océano sustenta una economía que rebasa los 1.5 de billones de dólares anuales en sectores como la pesca, turismo, biotecnología, energía; sin embargo, dijo, enfrenta amenazas mayores como la pérdida de biodiversidad, acidificación de los mares, contaminación plástica, sobrepesca y minería en aguas profundas, sin regulación clara ni mecanismos.
De ahí que el acuerdo, refirió, busca regular el acceso a los recursos genéticos marinos como bacterias, corales y algas; garantiza que los beneficios derivados de su uso se compartan de forma justa, especialmente en los países en desarrollo; y permite la creación de áreas marinas protegidas con base en criterios científicos.
Además, exige evaluaciones de impacto ambiental antes de realizar actividades en altamar; promueve la cooperación mediante la transparencia tecnológica, la capacitación científica y mecanismos financieros solidarios; y establece una estructura institucional con una conferencia de las partes, órganos científicos, una secretaría permanente y mecanismos para la solución pacífica de controversias.
Por su parte, la senadora Yeidckol Polevnsky Gurwitz, del PT, indicó que México es un país privilegiado y que los mares no tienen bandera ni partido, por lo que conservarlo es prioridad, ya que se trata de un patrimonio común de la humanidad, y por esa razón es importante ratificar el acuerdo; no se trata solo de un tratado, referirse a los océanos es hablar de vida, agregó.
Maki Esther Ortiz Domínguez, del PVEM, asentó que únicamente el 8.3 por ciento del océano cuenta con algún grado de protección, y que solo el 1.9 por ciento concierne a la altamar, por lo que es urgente una acción coordinada entre las naciones para alcanzar a proteger al menos el 30 por ciento de los océanos en 2030. La aprobación del acuerdo es positiva para el desarrollo sostenible y la conservación de los mares, océanos y recursos marinos, justificó.
Por el PRI, Carlos Hernando Sobrino Argaez, aseveró que México no puede ni debe quedar sólo al margen del acuerdo, aunque sea un hito histórico en la protección de los océanos, ya que debe asumir su responsabilidad ante el mundo y ante las y los mexicanos, pues no hay reglas claras ni limites en sus océanos y mares, de cara a las presiones económicos incompatibles con la sustentabilidad ambiental y la justicia social, por lo que urge construir un marco que garantice el uso responsable de estos recursos.
A su vez, Ivideliza Reyes Hernández del PAN, dijo que proteger los océanos no es sólo una responsabilidad ambiental, sino un imperativo ético y científico para el presente y futuro de la humanidad, por lo que este acuerdo permite el establecimiento de reglas claras para proteger la biodiversidad más allá de las fronteras nacionales en la alta mar, pues promueve un nuevo modelo de cooperación internacional.
Por Morena, Karina Isabel Ruiz Ruiz comentó que los océanos no reconocen fronteras, por lo que cada día están amenazados por la contaminación, el cambio climático y la sobreexplotación pesquera, lo que exige decisiones responsables para proteger el pulmón azul del planeta, particularmente cuando se pone en riesgo la seguridad alimentaria de millones de personas, de manera que el acuerdo beneficia la salud de los océanos y permite un trabajo en conjunto como naciones.