La Ciudad de México encabeza las reformas legales y la aplicación de políticas públicas en favor de los seres sintientes y desde 2013 se tipificó como delito cualquier acto de maltrato o crueldad contra los animales no humanos, afirma la legisladora
Seres Sintientes a Ley de Protección a los Animales
La diputada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México, Leticia Varela Martínez, presentó una iniciativa con proyecto de decreto por el que se derogan y adicionan diversas disposiciones a la Ley de Protección a los Animales del Distrito Federal, con la cual se incorpora el concepto de seres sintientes a los animales conforme lo marca la Constitución capitalina, elimina términos como el sacrificio y propone la transformación del esquema de zoológicos a santuarios con la única finalidad de buscar mejores condiciones de vida para los animales no humanos.
Durante la sesión ordinaria del órgano legislativo, la representante popular afirmó que la Ciudad de México encabeza las reformas legales y la aplicación de políticas públicas en favor de los seres sintientes, es decir de los animales no humanos, y puso como ejemplo que en 2013 se tipificó como delito cualquier acto de maltrato o crueldad contra los animales no humanos.
Señaló que la iniciativa propone la armonización de la denominación de Distrito Federal a Ciudad de México, además de establecer la obligación de veterinarios de elaborar un expediente clínico de cada uno de sus pacientes, mayores requisitos para la crianza y venta de perros y gatos, establece obligación del gobierno capitalino para apoyar a personas que rescaten animales de situación de abandono, se cambia el concepto de sacrificio humanitario por muerte humanitaria y establece que la venta de venenos para control de plagas únicamente la podrá realizar empresas legalmente establecidas, ya no los particulares, entre otros aspectos.
La diputada Leticia Varela afirmó que la propuesta para reformar La Ley de Protección a los Animales “aspira a ser un instrumento que deje de lado el especismo, es decir que abone a que los seres humanos dejemos de utilizar palabras como sacrificio animal para referirnos a la muerte de alguna especie”.
También, agregó se propone transformar el concepto de propietario por el de tutor; “Estoy convencida que debemos comenzar a hablar acerca violencia hacia los animales como parte del reconocimiento y respeto necesario para cambiar el paradigma y lograr otorgar derechos a los animales no humanos”, aseveró.
“Hay que aclarar que la violencia hacia estos seres no solamente existe de forma física, sino que al igual que para los humanos, para los animales la violencia emocional deja graves daños a su desarrollo integral, lo cual les provoca estrés o diversos trastornos en su comportamiento natural, tenemos un claro ejemplo de ello si observamos a los animales de vida silvestre que se encuentran en cautiverio”, agregó.
Por eso, abundó, se busca la transformación del esquema de zoológico tradicional a “Santuario de vida animal” con la única finalidad de buscar una mejor estancia para aquellos animales no humanos, que por diversas causas hoy tienen que vivir en cautiverio.
La legisladora Varela Martínez dejó en claro que la iniciativa contribuye además de la protección a los animales, a garantizar el derecho de todo habitante de la Ciudad de México a tener un medio ambiente sano, ya que los animales silvestres o domésticos tutelados por la presente norma forman parte de nuestro medio ambiente por lo que garantizar un trato digno y respetuoso a los mismos obedece al precepto constitucional protegido en el artículo cuarto de nuestra carta de derechos.
En su exposición, la diputada recordó los avances que se han logrado en la capital del país en favor de los animales, como es el caso de la prohibición de las redadas como método común de control animal y se han fomentado también las campañas de esterilización y adopción de animales de compañía, entre otras tantas acciones.
En los artículos transitorios de la iniciativa, se deja establecido que la persona titular de la Jefatura de Gobierno deberá etiquetar y destinar recursos suficientes para que, en un plazo no mayor a 5 años, los zoológicos de la Ciudad de México se transformen en santuarios; en tanto que el titular de la Agencia de Atención Animal deberá gestionar los recursos y la convocatoria para reclutar al personal para llevar a cabo sus tareas en la materia.