Organizaciones de protección animal dieron a conocer sus posiciones en torno de los denominados santuarios y su verdadera función, derivado de los acontecimientos suscitados por el aseguramiento del llamado santuario-  Fundación Black Jaguar-White Tiger, en donde se encontraron más de 200 animales, entre felinos, coyotes, y monos maltratados.

La organización internacional PETA Latino, afirmó que ya había alertado  durante años sobre Black Jaguar-White Tiger, (https://www.petalatino.com/blog/black-jaguar-white-tiger-al-descubierto/) “por ello aplaudimos a Claudia Sheinbaum y a Profepa por actuar contra este falso santuario después de que el propietario presuntamente descuidara a cientos de grandes felinos”.

Sostuvo que las trampas para turistas a menudo agregan la palabra “santuario” o “rescate” a sus nombres, pero el propósito fundamental de cualquier santuario de animales legítimo es brindarles a los animales condiciones de vida seguras y cómodas que les brinden una existencia tan natural como lo permite el cautiverio. Nunca crían ni venden animales ni permiten ningún tipo de interacción con animales silvestres o exóticos, y eso incluye obligar a los animales a participar en sesiones fotográficas. Las personas que se preocupan por los animales deben mantenerse alejados de las instalaciones que los explotan.

Por su parte , Brigada Animal, afirmó, en su blog, que “el problema no sólo es el mascotismo y el especismo de la opresión ejercida hacia los animales por Eduardo Serio (dueño de Black Jaguar White Tiger) y otros personajes del escándalo de la compraventa de animales para sus colecciones personales (como algunos narcotraficantes y los influencers Arturo Islas y Fofo Márquez), sino también el hecho de que estas prácticas son legales, por lo tanto, el problema principal es la propia SEMARNAT y el gobierno mexicano que permiten la explotación animal y la favorecen bajo falsos discursos de ayudar a animales bajo amenaza”.

Sostuvo que “lo que poco se nos dice es que esos animales provienen de la compraventa legal o ilegal que, a su vez, se da mediante la caza, siempre ilegal, y que no son reinsertados en sus hábitats sino forzados a la explotación sexual para seguir reproduciendo cachorritos para fotografiar y vender. Lo que tampoco se nos dice es que ningún santuario o reserva reproduce animales, ni está abierto al público ni tiene actividades lucrativas, lo que significa que muchos lugares “se cuelgan” del título de “santuario” o “reserva”, pero no son más que centros de explotación animal”. https://brigadaanimal.com/jaguares-y-tigres-no-son-mascotas-ni-animales-de-coleccion/

Asimismo, la Granjita Ty H, enfatizó que es de “vital importancia compartirles la definición de un santuario de acuerdo a la  Federación Global de Santuarios de Animales (GFAS):

“Un santuario es una instalación que rescata y proporciona refugio y cuidado a los animales que han sido abusados, heridos, abandonados o que están necesitados de alguna otra manera.

En un santuario no puede haber comercio, ninguna investigación invasiva o intrusiva, ninguna visita pública sin compañía de los encargados, ni contacto con animales salvajes, y no puede haber animales para exhibición ni educación.”

De igual forma, un santuario no solo implica un espacio geográfico, también debe considerar las necesidades físicas, emocionales y mentales de los individuos”.

https://granjitatyh.org/2022/07/05/posicionamiento-sobre-los-pseudo-santuarios/