En el Día Internacional del Medio Ambiente decenas de organizaciones ambientalistas y exfuncionarios relacionados con este sector señalaron que en la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador no hay nada que celebrar, cuando el presente gobierno se ha dado a la tarea de debilitar la estructura dedicada a la vigilancia y protección del medio ambiente del país, además de haber aplicado un recorte del 75% del presupuesto en este rubro.

Ex funcionarios advirtieron lo siguiente al Presidente en un documento titulado “Un Llamado Urgente” y que en uno de sus párrafos dice: “Que no quepa la menor duda: la erosión de las instituciones ambientales impedirá enfrentar los grandes retos globales que enfrenta la humanidad, esto es, el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad.

Nuestro país, desde la negociación del Convenio Marco de Naciones Unidas de Cambio Climático, luego en el Protocolo de Kyoto, seguido después en la reunión en Cancún y después en la COP de París, ha sido sumamente activo y siempre ha cumplido con sus compromisos y obligaciones internacionales.

Tenemos ya un marco legal en materia de Cambio Climático de vanguardia frente a la comunidad internacional. En ello fuimos, hasta ahora, líder internacional. En la actualidad, con las políticas que se están impulsando, hemos retrocedido al menos 40 años. Nuevamente se da prioridad a la producción de energía mediante combustibles fósiles y gasolinas frenando la inversión en energías limpias y renovables”.

Sin embargo, el discurso principal del Presidente se ha centrado la construcción de la refinería Dos Bocas y en la construcción del Tren Maya, ambos temas desde el punto de vista de varias organizaciones tienden a la generación de energía que contamina (porque son los combustibles fósiles) y la de deforestación de la selva en el sur país.

Esto es, México no cumpliría con los acuerdos internacionales, pero también expondría a la extinción de vastas zonas selváticas y millones de animales morirían por efecto del tráfico de especies, la cacería y el desplazamiento de su hábitat, esto impactando en la salud del planeta y, por tanto, de millones, de mexicanos.

En el Día del Medio Ambiente, el Presidente apuesta al petróleo y se enfrenta a las fuercitas jurídicas, políticas y financieras con las empresas de energía limpias. Esto, sin duda, está teniendo un efecto paralizante en el camino del país rumbo a la tendencia de contar con energía renovable o limpias. Varias organizaciones han señalado al señor Presidente de la República Mexicana, que no están de acuerdo con él, y argumentan que está regresando al país 40 años atrás.

Hoy el Presidente de México, quien ganó las elecciones con un amplio margen, tal parece que está perdiendo cada vez más simpatías y apoyos, y tal parece que cada vez más está perdiendo presencia en el sector ambiental, lo que significa que no ha podido lograr unidad nacional en materia ambiental.

Cabe destacar en que estos momentos que México está cayendo en un profundo hoyo económico, desempleo y una pandemia que está cobrando la vida de miles de mexicanos, el señor presidente no ve a la unidad nacional como un camino viable para superar los retos nacionales e internacionales que se vislumbran con el conflicto Estados Unidos de América contra China.

En estos tiempos la unidad nacional es un camino que no se puede perder, pues nos haría frágiles ante las nuevas tempestades que se avecinan,  éste es un tema que tienen que evaluar tanto el gabinete, los partidos y grupos sociales que ven en el Señor Presidente al guía que conduce al país. La pregunta es ¿unidad nacional o desunidad nacional?

Es tiempo de posiciones claras y dejar de lado ambivalencias y contradicciones,  tampoco se puede regresar al pasado, es primordial que el líder del barco llamado México , asuma el papel que le fue encomendado y es ser el Presidente de todos los mexicanos.