La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA)  aseguró una caja proveniente de Austria, conteniendo 12 ejemplares de tarántula, en las instalaciones de una empresa de mensajería y paquetería, debido a que no se encontró documentación que acreditara su legal procedencia.

Personal de la empresa de mensajería UPS del Aeropuerto Internacional de Guadalajara detectó el cargamento que tenía como destino la entrega a un particular en Jalisco, situación que informó a esta Procuraduría Ambiental en dicha entidad.

No se encontraron documentos que acreditaran la legal procedencia de los ejemplares, por lo que se les aseguró y fueron enviados a una UMA para su resguardo y atención

Inspectores de la PROFEPA atendieron el reporte de la empresa de mensajería; al abrir la caja encontraron 12 ejemplares de arácnidos que fueron enviados a México a través del sistema de paquetería ordinaria.

Los inspectores federales corroboraron que la empresa de paquetería no contaba con los documentos que acreditaran la legal procedencia de los ejemplares, por lo que se impuso como medida precautoria el aseguramiento de los 12 organismos.

Los ejemplares fueron enviados a una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA), donde -derivado de su dictamen- se estará en posibilidades de definir el tipo de especies y su área de distribución, así como identificar si se encuentran dentro de alguna categoría de protección dentro de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES por sus siglas en inglés).

Con estos hechos, suman más de 158 ejemplares que -bajo estas circunstancias- son asegurados por la Delegación Jalisco de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente durante el presente año.

Suman ya más de 158 ejemplares que, bajo estas circunstancias, son asegurados por la Delegación Jalisco de la PROFEPA durante el presente año

La PROFEPA inició las diligencias correspondientes dentro de su competencia y, además, presentará denuncia penal ante la Procuraduría General de la Republica (PGR) para que se inicien las averiguaciones correspondientes para dar con los posibles responsables de este hecho, por el tráfico de ejemplares de vida silvestre.

El Código Penal Federal establece como delito el tráfico de especies de la vida silvestre bajo algún estatus de protección especial, con una penalidad hasta de nueve años de prisión y tres mil días de multa; además que en el procedimiento administrativo estas acciones son sujetas a una multa de hasta 50 mil Unidades de Medida y Actualización vigentes.