El rector Leonardo Lomelí Vanegas refrendó que la UNAM continuará forjando puentes entre disciplinas, saberes y actores claves para impulsar acciones orientadas a mejorar las condiciones de vida de los seres del planeta y que deben ser, al mismo tiempo, una transformación cultural, política y educativa.

Al inaugurar el Coloquio Internacional Perspectivas sobre la Ecología en América Latina 2025, acompañado por las secretarias de Medio Ambiente y Recursos Naturales; y de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación del Gobierno de México, Alicia Bárcena Ibarra y Rosaura Ruiz Gutiérrez, respectivamente, el rector manifestó que el encuentro busca reconocer a América Latina como generadora de saberes propios y fuente de soluciones innovadoras a la crisis civilizatoria que hoy pone en tensión los fundamentos éticos, políticos y epistémicos de nuestro tejido social.

El legado de este tipo de encuentros será: “la cimentación de una ecología para todas y todos: justa, incluyente y con impacto medible”, puntualizó.

Insistió en que la ciencia no puede permanecer indiferente ante la injusticia, y que América Latina y el Caribe no son solo testigos, sino protagonistas activos y conscientes del futuro ecológico del planeta.

Explicó que la región alberga alrededor del 50 por ciento de la biodiversidad planetaria, con algunos de los ecosistemas más valiosos, como la Amazonia, los Andes tropicales y los bosques mesoamericanos. No obstante, esta riqueza biocultural coexiste en un entorno marcado por la confrontación.

Según los datos más recientes del Atlas para la Justicia Ambiental, en América Latina suceden, al menos, una cuarta parte del total de los conflictos socioambientales a nivel mundial. Una parte significativa de estos están asociados a megaproyectos extractivos en territorios indígenas o en entornos ecológicos sensibles.

“Desde la Universidad de la nación reafirmamos activamente nuestra responsabilidad ante este panorama. No observamos desde la distancia; participamos activamente, desde el rigor académico y la creatividad colectiva, en el ejercicio permanente de reflexionar sobre el impacto de la ciencia en nuestras sociedades. Promovemos una ciencia abierta a la inter y transdisciplinariedad, al quehacer comunitario y a la atención sensible de los problemas, con el objetivo de generar transiciones socioecológicas reales”, sostuvo el rector.

En tanto, Rosaura Ruiz apuntó que “este coloquio es más que una reunión académica: es un espacio de diálogo regional sobre el devenir ecológico de América Latina y el Caribe. Articulando historia, conocimiento, práctica científica y acción política, buscamos trazar una cartografía crítica de desafíos y posibilidades”.

Indicó que el título de esta actividad académica -Perspectivas de la Ecología en América Latina- “remite a la pluralidad de tradiciones, problemas y enfoques que configuran el pensamiento ecológico en nuestra región”; además que convoca a la reflexión crítica.

Por ejemplo, sobre el concepto de conservación “¿Qué significa restaurar un ecosistema? ¿A qué momento histórico habría que devolverlo, y con qué criterios? Las ideas de “naturaleza”, “salud ecológica” y “biodiversidad” -aunque fundamentales para las políticas ambientales- no son neutras ni unívocas: cargan significados distintos según contextos científicos, éticos y sociales”, aseveró la también coordinadora del Seminario Universitario de Evolución.

En ese debate, añadió, América Latina y México pueden aportar miradas propias sobre lo que se valora, por qué se valora y cómo se construyen políticas ecológicas que reconozcan esa pluralidad, en vínculo claro con la ecología y las comunidades.

En el auditorio del Jardín Botánico, del Instituto de Biología (IB), Alicia Bárcena explicó que la ecología enfrenta diversos desafíos, entre ellos: resguardar y restaurar la riqueza de México, con una visión sistémica pues es lo que nos permitirá ser más resilientes.

Detalló que México es uno de los 17 países megadiversos del mundo, alberga el 12 por ciento de las especies conocidas, y en el territorio hay más de 180 ecosistemas distintos, además de que tiene 25 millones de personas indígenas, cuyas comunidades han podido preservar los ecosistemas más críticos.

La funcionaria llamó a que, desde el ejercicio de la ciencia, se busque alcanzar la justicia social y el desarrollo sostenible con perspectiva ecológica. Reiteró que la premisa con la que se trabaja hoy en día es que no puede existir mejora ambiental sin justicia social, es una nueva ética y forma de política y requiere la participación de todos.

En su oportunidad, la secretaria de Desarrollo Institucional de la UNAM, Tamara Martínez Ruíz, acotó que el gran reto universitario es fortalecer la colaboración interdisciplinaria y establecer puentes sólidos con quienes toman decisiones.

Externó que los diálogos que se generen en el encuentro fortalecerán alianzas necesarias que permitirán plantear soluciones a corto, mediano y largo plazo. “La historia no nos juzgará por cuántos artículos indexamos, sino por cuánto logramos mitigar la devastación y alimentar la esperanza”.

A su vez, la coordinadora del Seminario Universitario de Historia, Filosofía y Estudios de las Ciencias y la Medicina, Ana Rosa Barahona Echeverría, comentó que América Latina es un espacio estratégico para la producción científica, pero aún no hay un foro dedicado a examinar la trayectoria histórica de la ecología, sus contribuciones específicas y los retos que enfrenta en los ámbitos científico y social.

Por ello, sostuvo, en el Coloquio se realizará una reunión para conformar la Red Latinoamericana de Ecología, iniciativa clave para fortalecer la colaboración de la comunidad científica de la región.

Además, la coordinadora del Seminario Universitario de Sociedad, Medio Ambiente e Instituciones, Marisa Mazari Hiriart, abundó que el encuentro invita a mirar la ecología no solo como un campo científico sino de una conversación que implica cruzar disciplinas, territorios, experiencias de vida y formas de ver el mundo. Un tema clave es repensar cómo hacer investigación, refirió acompañada por la investigadora posdoctoral en la Facultad de Ciencias, María Clerici Hirschfeld.

En el evento estuvieron el exrector de la UNAM, José Sarukhán Kérmez; la profesora emérita de la Facultad de Ciencias, Annie Pardo Cemo; el investigador emérito Daniel Piñero Dalmau; la coordinadora de la Investigación Científica, María Soledad Funes Argüello; las directoras de los institutos de Biología y Ecología, Susana Magallón Puebla y Ana Elena Escalante Hernández, respectivamente, así como diversas autoridades y estudiantes.

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