Se trata del proyecto “Aztech-Sat” que busca crear un sistema de monitoreo basado en satélites artificiales con software libre y hardware comercial
Desarrollan satélites para rastrear animales marinos
Por invitación de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, y con apoyo de la Agencia Espacial Mexicana (AEM), la UNAM –y cuatro universidades mexicanas más– participa en el diseño y construcción de cuatro minisatélites idénticos de 10x10x10 centímetros (llamados CubeSat, por su diseño de cubo), los cuales orbitarán la Tierra para rastrear animales marinos, que migran desde los polos norte y sur hasta el ecuador y de regreso.
El proyecto, llamado “Aztech-Sat”, es una constelación de satélites que viajarán al exterior del planeta de una forma consecutiva y ordenada, los cuales serán puestos en órbita en una misión que la NASA planea para 2025.
El anuncio oficial se dio a conocer durante el Tercer Congreso Nacional de Actividades Espaciales (CONACES 2022), organizado por la AEM, en Aguascalientes.
El director del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional, Jesús González González, refirió que el espacio es estratégico y relevante en lo relativo a la Tierra y en las grandes escalas planetarias, galácticas y cosmológicas. “El ser humano, desde todas sus instancias educativas, profesionales y nacionales debe explorarlo y explotarlo, en el mejor de los sentidos”.
Al hacer uso de la palabra, Andrés Martínez, representante técnico de la agencia espacial estadunidense para América Latina, subrayó la importancia de la colaboración y formación de capital humano en el tema espacial. “Estamos ante un gran reto científico y técnico, porque tenemos que trabajar equipos mexicanos de diversas universidades como un solo equipo”.
Este ejercicio colectivo, advirtió, será relevante, porque es así como trabaja la NASA con especialistas de todo el mundo.
En su oportunidad, el director general de la AEM, Salvador Landeros Ayala, manifestó que con planes como AztechSat se asimila el conocimiento y experiencia, a fin de escalar en la construcción de satélites de mayores dimensiones y de proyectos más ambiciosos que fomenten la investigación y la formación de recursos humanos en el área.
Potencial universitario
La Universidad Nacional desarrollará uno con el respaldo de la Unidad de Alta Tecnología (UAT), de la Facultad de Ingeniería (FI), los laboratorios nacionales de Ingeniería Espacial y Automotriz (LN-INGEA, adscrito a la FI) y de Observación de la Tierra (LANOT, dependiente del Instituto de Geografía), así como de especialistas de los institutos de Astronomía (IA) y de Geofísica (IGf), detalló en entrevista posterior el coordinador del Programa Espacial Universitario (PEU), José Francisco Valdés Galicia.
“El Instituto de Astronomía forma parte del PEU y participa con algunos de nuestros ingenieros. Nuestro papel específico es apoyar, desde el punto de vista técnico y científico, lo que requiere el proyecto”, aseguró también en entrevista Jesús González González.
Cabe señalar que el costo del CubeSat universitario será de 10 millones de pesos, inferior a los presupuestos que antes se gastaban en satélites, que eran de decenas o centenas de millones de pesos.
Los otros tres estarán a cargo de las universidades Popular Autónoma de Puebla, Panamericana -desarrollarán uno cada una- mientras que las universidades Aeronáutica de Querétaro y Politécnica de Querétaro construirán un equipo entre las dos.
Se trata de instrumentar un sistema de monitoreo de especies marinas con mejoras significativas, como mayor cobertura geográfica, menor costo de inversión y mayor ancho de banda para transmisión de datos, añadió Valdés Galicia.
“Los equipos que se utilizan desde hace unos 10 o 15 años en Estados Unidos para hacer este monitoreo necesitan actualizarse, pues hoy tienen limitaciones en los sensores que se ponen a grandes animales marinos para que estos puedan transmitir datos de rastreo a los satélites. Este será el primer proyecto de su tipo en el mundo en el que México participa con una tecnología más moderna”, señaló.
Grandes especies marinas como ballenas, tiburones y leones marinos llevarán los sensores en su cuerpo y las señales que emitan serán captadas por los CubeSat (de uno a 1.33 kilogramos de peso) para seguir sus trayectorias y migraciones, conocer sus costumbres y cómo les afecta el cambio climático.
Con el proyecto se creará un sistema de monitoreo de especies marinas basado en satélites artificiales implementado con software libre y hardware disponible comercialmente.
“Científicamente lo que se pretende es generar una base de datos de movimiento y localización de especies marinas para hacer investigación a gran escala. Desde el punto de vista tecnológico, del desarrollo del satélite, busca crear tecnología con software o programas de electrónica comercial para que pueda bajar los costos”, explicó González González.
Las entidades promotoras del plan son: la NASA; el Bureau Ocean Energy Managment (BOEM), que se encarga del monitoreo de la explotación responsable de los recursos energéticos, minerales y marinos de la plataforma continental exterior de Estados Unidos, con apego a lineamientos de protección y preservación medioambientales; y la AEM, organismo público encargado de coordinar la política espacial de México.
Hoy se formaliza el proyecto e iniciamos con los diseños y las componentes que deben tener los equipos. Lo importante es que tenemos garantizado el lanzamiento porque es un proyecto a invitación de la NASA, y que contamos con su conocimiento y soporte para que lo aprovechen nuestros estudiantes de licenciatura y posgrado, abundó Valdés Galicia.
El director del IA aclaró que los cuatro minisatélites serán idénticos y desarrollarán una especie de kit que puedan adquirir, armar y aprender sobre ellos distintas entidades del país, en inicio las cinco universidades participantes. “Los equipos, además de su labor científica con el rastreo de animales marinos, servirán para entrenar a estudiantes e ingenieros en el uso y desarrollo de estas tecnologías”, afirmó.