El Día Mundial de las Abejas no es una celebración: es una oportunidad para hacer sonar la alarma y concientizarnxs sobre la importancia de estxs seres
Las abejas y su relación con la apicultura
Por Brigada Animal México
Las abejas han sido declaradas la especie más importante del mundo y, desde 2017, por iniciativa de la ONU y la FAO, tienen su propio día. Y es que ellas, a pesar de no ser las únicas involucradas, son responsables de la polinización, fundamental para la supervivencia de los ecosistemas, esencial para la producción y reproducción de muchos cultivos y plantas silvestres.
Estxs seres maravillosxs poseen un sistema nervioso que incluye un cerebro y son capaces de mostrar un comportamiento sorprendentemente complejo: se comunican entre sí a través de diferentes tipos de movimientos corporales para hacerse saber la posición de las flores y dónde recoger el polen de estas; tienen una gran memoria que les permite recordar dónde se encuentran flores y colmena; son sociales, capaces de aprender y manifestar comportamientos complejos; y son seres sintientes, capaces de sufrir y disfrutar.
Sin embargo, pese a todas sus características únicas, las abejas corren el peligro de extinguirse. De acuerdo al IPBES (Expertos Internacionales Especializados en Biodiversidad), el año pasado hubo un descenso en su población que alcanzó el 37% debido a conocidas actividades humanas (como prácticas agrícolas intensivas, cambios en el uso de la tierra, plaguicidas, especies exóticas invasoras, enfermedades, plagas y el cambio climático) y otra no tan conocida, pero que lxs afecta de una manera muy directa: la apicultura, que no es más que la explotación y esclavitud de estxs seres, pues les explotan a muerte y les arrebatan su fuente de alimentación.
La apicultura emplea de forma común prácticas muy crueles como el corte de alas y patas, la inseminación artificial, matanzas de manera deliberada de aquellxs que sobreviven al duro invierno al que se enfrentan en pésimas condiciones y el marcado de abejas reina, que las deja traumatizadas durante toda su corta vida.
El Día Mundial de las Abejas no es una celebración: es una oportunidad para hacer sonar la alarma y concientizarnxs sobre la importancia de estxs seres. Ayuda a protegerlas evitando consumir productos hechos con o a base de miel, pues esto contribuye con su explotación y afecta sus vidas por completo.