Uno de los retos para los médicos en formación es contar con los suficientes sitios donde desarrollarse profesionalmente, dijo Germán Fajardo Dolci, director de la Facultad de Medicina
Rememora la UNAM la primera cátedra de medicina en América Latina
Ante los retos en atención médica y salud digital “debemos apurarnos para brindar a nuestros alumnos las mejores herramientas para enfrentar el futuro”, indicó Germán Fajardo Dolci, director de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, en la conmemoración por los 440 años de la primera Cátedra Prima, o Cátedra de Medicina, inaugurada oficialmente el 7 de enero de 1579.
Ante expertos en educación y en historia y filosofía de la medicina, de la Universidad de Salamanca, España, y de la UNAM, expuso que eso sólo se puede lograr viendo el pasado, el presente y, sobre todo, planeando los escenarios para que los futuros médicos puedan tener un mejor desarrollo.
Uno de los retos para los médicos en formación, prosiguió, es contar con los sitios suficientes donde desarrollarse profesionalmente. Sin embargo, el país cuenta con un sistema de salud fragmentado: tenemos por un lado al IMSS, y por otro al ISSSTE y al Seguro Popular, todos con organizaciones diferentes.
Ante ello, planteó: “¿para qué sistema estamos formando a los médicos universitarios? No existe una respuesta única al respecto”.
En el auditorio Gustavo Baz Prada de la Antigua Escuela de Medicina consideró que los jóvenes que estudian esta área del conocimiento enfrentan retos complicados y diferentes a los de hace 440 años; sin embargo, no son menores y no todos dependen de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Por su parte, Antonio Carreras Panchón, académico de la Universidad de Salamanca, España, recordó que en el siglo XVI la medicina fue la primera de las actividades que pudieran llamarse técnicas, y que se institucionalizaron de manera clara; las facultades de medicina fueron aquellas que habilitaron y dieron licencia para ejercer una profesión singular, que es el acto de curar, actuar sobre la enfermedad.
En su charla denominada “La Facultad de Medicina y la enseñanza de la medicina en Salamanca en la segunda mitad del siglo XVI”, resaltó que entonces la medicina se vio muy condicionada por el peso que tenían el derecho y la teología.
Por último, comentó que en un mundo liberal, en el que se ofrece una economía de mercado, muchas veces lo que domina son los intereses “siniestros” de carácter privado y corporativo.
Cátedra prima
El 21 de junio de 1578 se aprobó la primera Cátedra de Medicina, siendo la más antigua del continente en la Real y Pontificia Universidad de México, hoy Universidad Nacional Autónoma de México.
La Cátedra Prima era la única que incluía todo el conocimiento médico de su época. Se creó una cátedra prima y otra cátedra de vísperas, una por la mañana y la otra por la tarde.
La primera estudiaba el cuerpo sano y la segunda al enfermo; ambas estuvieron basadas en los tratados de Hipócrates, entre ellos Los pronósticos, Las epidemias y Los aforismos.
En 1621 se agregaron dos cátedras más: anatomía y cirugía. 17 años después se agregó la de astrología y matemáticas.
A mediados del mismo siglo se impuso un modelo teórico y práctico que incluyó la disección de cadáveres. Tras terminar sus estudios y haber aprobado el “juicio final”, el Real Tribunal del Protomedicato de la Nueva España expedía una licencia formal con la que se tenía la facultad para atender pacientes en la calle y ejercer la práctica médica remunerada.