La violencia contra las mujeres es una epidemia global y afecta a millones de todas las edades día con día. En México esta violencia ha tenido un incremento de 4 puntos porcentuales en los últimos 8 años; Más de 35 millones de mujeres en el país han experimentado alguna situación de violencia a lo largo de su vida, lo que corresponde al 70.1% de la población de mujeres de 15 años en adelante, de acuerdo a datos del INEGI.

Cabe destacar que la violencia psicológica es la de mayor prevalencia (51.6 %), seguida por la violencia sexual (49.7 %).

El incremento hacia la violencia contra las mujeres es alarmante, pero es igualmente preocupante que en México, la procuración de justicia es sumamente deficiente ya que sigue predominando una situación de impunidad que lo colocó dentro de los 10 países con mayor impunidad en el mundo (Eurasia Group). Estos datos se complementan con los emitidos por la Asociación Civil “Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad”, ya que, desde 2013 a la fecha, se han registrado en el país 7 mil 246 feminicidios, y la impunidad en estos delitos es del 76%, por lo que menos del 25% de esos crímenes ha terminado en una sentencia condenatoria.

Los diversos factores que contribuyen a la impunidad en los delitos contra las mujeres:

• Falta de acceso a la justicia: Muchas mujeres no denuncian los delitos por miedo a represalias o por falta de confianza en las autoridades.

• Dificultades en la investigación: Los delitos contra las mujeres a menudo son difíciles de investigar, ya que muchas veces no hay testigos o las pruebas son escasas.

• Corrupción: La corrupción en el sistema judicial también puede contribuir a la impunidad.

Para enfrentar el desafío de la impunidad en los delitos contra las mujeres, es necesario fortalecer las instituciones encargadas de la procuración y administración de justicia además de capacitar de manera contínua a los servidores públicos para que atiendan con sensibilidad y perspectiva de género los casos de violencia contra las mujeres. Promover la denuncia de los delitos y brindar apoyo a las víctimas, así como dotar a la Red Nacional de Refugios de mayor presupuesto.

“La lucha contra la impunidad en los delitos contra las mujeres es una tarea de todos, es necesario que el gobierno, la sociedad civil y el sector privado trabajen juntos para lograr un cambio real, 2024 es un año crucial para abordar este problema en todos los espacios posibles, tanto públicos como privados. Es hora de que en México se tomen medidas contundentes para erradicar la violencia contra las mujeres y garantizar el acceso a la justicia para las víctimas”, comentó Marilú Rasso, directora ejecutiva de Espacio Mujeres