Por Gisele Maia, en portugués

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Los ciclistas pedalearon hacia Adelaida, una ciudad australiana golpeada por otra ola de calor con temperaturas de alrededor de 40 grados. De repente vieron un koala sentado en medio del camino.

El grupo se detuvo para verificar si el koala necesitaba ayuda y el animal sediento se acercó a una de las bicicletas para beber de una botella de agua, algo inusual para un animal salvaje, como dijo uno de los ciclistas a 7News:

“Me detuve en mi bicicleta y él se acercó a mí, bastante rápido por un koala. Cuando le di a beber todas nuestras botellas de agua, se subió a mi bicicleta «.

Anna Heusler compartió las imágenes en Instagram, enfatizando que los koalas, desafortunadamente, a menudo sufren sed debido al calor incontrolable:

“Este koala tiene mucha sed debido a una ola de calor. Se me acercó cuando me detuve y me subí a mi bicicleta mientras le daba agua para beber «.

De hecho, las altas temperaturas están causando muchas víctimas: los koalas a menudo mueren de sed, otros mueren de hambre por la escasez de hojas de eucalipto debido a la devastación de los bosques. O terminan severamente quemados en incendios, como sucedió recientemente con Lewis, el Koala rescatado de las llamas que eventualmente no resistió y murió poco después en el hospital.

Esta alarmante situación podría llevar a la extinción de estos animales en 30 años.