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Es clave profundizar en la cooperación regional en Latinoamérica y en el Caribe a partir del intercambio de la ciencia y el conocimiento, así como la eficiencia en cuanto a mecanismos de coordinación intersectorial

México y Latinoamérica deben enfrentar y adaptarse de manera urgente al cambio climático

En el marco del último día del Tercer Encuentro “México ante el cambio climático”, se presentaron los retos y oportunidades de nuestro país para hacer frente al fenómeno mundial. Las mesas de trabajo desarrollaron temas cruciales para hacer efectivo el combate contra el fenómeno por la vía de políticas públicas, financiamiento para proyectos, innovación tecnológica y crecimiento verde, y el fortalecimiento de la agenda de océanos tanto para la adaptación y mitigación.

Marcos Regis Da Silva, Director Ejecutivo del Instituto Interamericano de Investigación en Cambio Climático; Ma. Dolores Barrientos Alemán, representante del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en México, y Amparo Martínez Arroyo, Directora General del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), llevaron a cabo un diagnóstico y diversas reflexiones sobre el tema en la región.

En el último día de actividades del Tercer Encuentro Nacional, “México ante el Cambio Climático”, se presentaron grandes retos para lograr las metas y temas que serán prioritarios para México ante el cambio climático

Regis da Silva señaló que actualmente existen más de 900 tratados multilaterales y más de mil 500 tratados bilaterales, entre otros acuerdos internacionales referidos a cuestiones ambientales, que han tenido como resultado una gobernanza fragmentada y congestión de tratados. Puntualizó que en América Latina hay numerosos países con normativas nacionales extremadamente prohibitivas para la investigación.

Explicó que el problema es particularmente grave en aquellos lugares donde la interfaz entre la ciencia y la política no está muy desarrollada como consecuencia de la debilidad de las instituciones científicas. «Urgen más alianzas a fin de crear redes autosustentables de pares, con apertura de la ciencia y los datos, porque ninguna organización puede tener éxito de forma aislada», dijo.

Por su parte,  Ma. Dolores Barrientos presentó los escenarios en cuanto desertificación, impacto hídrico, y en océanos y mares de la región, en especial en México. Resaltó que América Latina y el Caribe, enfrentan enormes desafíos ambientales y sociales que están aumentando por el impacto del cambio climático, incluyendo la pérdida acelerada de ecosistemas naturales, contaminación, problemas en la salud y modelos de producción insostenibles.

«Pobreza, inequidad y las enormes diferencias entre comunidades urbanas y rurales son un problema persistente en América Latina y el Caribe», dijo.

Explicó además que, en la región, los motores del cambio climático han sido cinco: 1) el crecimiento económico, por un desarrollo a expensas de los recursos naturales; 2) el crecimiento de la población, que está demandando patrones de producción y consumo insostenibles; 3) el propio cambio climático, por sus efectos de estrés hídrico, pérdida de tierras bajas, incremento en el riesgo de desastres naturales, cambios en la productividad agrícola y pérdida de biodiversidad; 4) falta de innovación tecnológica, porque el número de técnicos, ingenieros, investigadores y científicos no está a la par del tamaño de las economías de la región; y 5) la falta de gobernanza, dado que la región enfrenta deficiencias en la capacidad institucional, poca coordinación intersectorial y leyes obsoletas, además del impacto de la corrupción que llega a representar a más del 20% del producto interno bruto regional.

Durante la tarde se llevaron a cabo mesas de discusión en los diversos temas que engloban al cambio climático. Referente al tema de los mecanismos de financiamiento para el cumplimiento de los compromisos de México ante el cambio climático, se revisaron los esfuerzos nacionales que aportan elementos al avance internacional para articular el financiamiento y enfrentar el cambio climático.

Asimismo, el tema de innovación tecnológica para el cambio climático, resaltó la importancia de fomentar la innovación para lograr las metas de México ante el cambio climático.

La mesa La educación y divulgación desde un enfoque de derechos ante el cambio climático profundizó sobre la importancia de la educación formal y no formal como un recurso necesario en la generación de agentes de cambio ante los nuevos tiempos y retos climáticos

En la mesa Fortalecimiento de capacidades para la adaptación al cambio climático: enfoques, oportunidades y retos, se trataron diferentes enfoques para el análisis y la aplicación de acciones dirigidas al fortalecimiento de capacidades vinculadas a la adaptación al cambio climático, así como al reconocimiento de los vacíos y las oportunidades en la materia, ante diversos contextos territoriales y actores sociales.

Una mesa más tocó los Retos del desarrollo económico bajo en carbono, en un análisis de fortalezas, debilidades y áreas de oportunidad económicas, sociales y ambientales para integrar al país dentro de una trayectoria de economía verde.

En este sentido, el crecimiento verde en México, fué otro tema clave, donde se planteó la importancia de desarrollar modelos económicos paralelos al cuidado de los bienes naturales que proporcionan los recursos y los servicios ambientales de los cuales depende nuestro bienestar, por medio de inversión e innovación que apuntalen el crecimiento sostenido y abran paso a nuevas oportunidades económicas.

Otros temas que no fueron menos importantes abordaron la urgencia de promover cultura climática a partir de una comunicación basada en conocimiento y promoción de buenas prácticas para la adaptación y mitigación en diversos contextos socioambientales, un ejemplo fue la campaña de comunicación “El Cambio climático nos toca”, que el propio INECC lleva a cabo con fin de sensibilizar a la población mexicana sobre los efectos del cambio climático, así como medidas de adaptación y mitigación.

La mesa La educación y divulgación desde un enfoque de derechos ante el cambio climático profundizó sobre la importancia de la educación formal y no formal como un recurso necesario en la generación de agentes de cambio ante los nuevos tiempos y retos climáticos.

Finalmente se discutieron temas de igualdad de género y adaptación al cambio climático, donde se analizaron los desafíos y nuevas propuestas, y se revisaron los avances y retos para transversalizar el enfoque de género en las políticas sectoriales vinculadas a la adaptación al cambio climático.