El Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, informó que derivado de las investigaciones realizadas por distintas instituciones locales y federales, como las Secretarías de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC), de Salud (SEDESA), de Inclusión y Bienestar Social (SIBISO), de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI), de Gobierno (SECGOB), el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) y Petróleos Mexicanos (PEMEX), la madrugada de este miércoles 10 de abril fue cerrado el pozo Alfonso XIII del SACMEX, ubicado en la Alcaldía Álvaro Obregón, que fue identificado como el punto de origen de la problemática en la calidad del agua en el norponiente de la Alcaldía Benito Juárez.

“Después de un trabajo de verificación territorial, de investigación, fue muy importante dar con un punto que es el pozo de Alfonso XIII de donde se emanaba y dispersaba esta agua con un olor extraño, ahora fue cerrado y fue limpiado. (…) El pozo de Alfonso XIII, aunque esté en Álvaro Obregón solo abastece esa zona de Benito Juárez, nada más. (…) Este pozo ya no surte agua a la red. (…) Una vez que se cerró el pozo de Alfonso XIII y a lo largo de las próximas dos semanas, aproximadamente, se estará dando todo el proceso para que vaya saliendo esta sustancia que se encuentra en algunos puntos de la red hidráulica de esta región”, señaló.

En conferencia de prensa, destacó que, al no encontrar afectaciones en el tanque de Santa Lucía perteneciente al Sistema Cutzamala, ni en los pozos Rosendo Arnaiz, Miraflores y Jardín Pombo, ubicados en esta zona de la Benito Juárez, se amplió el perímetro de búsqueda y verificación a la Alcaldía Álvaro Obregón, en su colindancia con Benito Juárez.

Además, el SACMEX analizó cajas de válvulas, SGIRPC tres gasolineras y el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) establecimientos que manejan solventes, combustibles y químicos.

“Ampliamos el radio de investigación, si no encontramos un elemento contundente, porque las gasolineras que visitamos no reportaban algún tipo de fractura y no encontramos establecimientos que implicaran un derrame amplio de algún tipo de sustancia, nos fuimos a Álvaro Obregón. No es que tuviéramos reportes de Álvaro Obregón, es importante precisarlo, no hemos tenido ningún reporte de Álvaro Obregón (…) Pero esta zona es fronteriza y además es más alta que Benito Juárez, si nos vamos hacia esta franja podemos estar hasta 10 metros más arriba que en Benito Juárez que es plano, entonces eso podría ocasionar algún tipo de escurrimiento”, explicó.

Adicionalmente, destacó que PEMEX analizó un ducto ubicado a 500 metros del pozo Alfonso XIII mediante pruebas herméticas de verificación de la presión dentro del ducto con el fin de descartar fugas de combustible.

“Se bloqueó el ducto, se hizo la prueba de presión y la presión se mantuvo constante en el ducto, lo cual indica, en una primera prueba, que no hay ninguna fisura o salida. Aquí partíamos de la idea de analizar si aquí tal vez habría huachicol o si por alguna otra razón se había dañado el ducto, pero no se encontró en esta primera prueba nada de eso. Todavía mañana se va a hacer otra prueba técnica con un aparato que va adentro y que va videando y fotografiando el interior del ducto para encontrar, para localizar, si hay alguna fisura”, añadió.

Por otro lado, recapituló que, derivado de los primeros reportes ciudadanos sobre las condiciones del agua recibidos por el Gobierno capitalino el pasado 31 de marzo, de inmediato se coordinó un despliegue interinstitucional con personal de SACMEX, SGIRPC, SIBISO y SEDESA.

Desde el 4 de abril, dijo, se instaló un Puesto de Mando en el Parque San Lorenzo, de la colonia Tlacoquemécatl, en el que se atiende y orienta a la población, además de brindar agua potable embotellada para consumo de los vecinos de la zona que la soliciten.

“Hemos tenido en campo, en la zona, más de 400 servidores públicos de las áreas de Bienestar Social, Sistema de Aguas, Salud y Protección Civil en atención directa. (…) Se pusieron a las órdenes de la gente, se contactó a quienes habían presentado algún reporte. (…) Calculamos más o menos que se hicieron aproximadamente unas 2 mil visitas y aparte llegaron otras personas al puesto de mando. Entonces, tomando en cuenta las familias completas estamos hablando de 4 mil, 5 mil personas a las que se ha dado atención durante este lapso”, mencionó.

Por su parte, apuntó, el SACMEX revisó registros, pozos, red primaria e infraestructura hidráulica de la zona y tomó mil 300 muestras de tomas domiciliarias; mientras que servidores públicos de la SGIRPC realizaron pruebas de explosividad en cisternas y depósitos de agua.

“No se encontró ningún caso en donde se presentara explosividad, todos los casos dieron explosividad cero”, afirmó.

En tanto, resaltó que personal de Participación Ciudadana de SIBISO llevó a cabo mil 452 visitas a domicilios, con el fin de recolectar muestras que fueron canalizadas a las distintas instituciones para llevar a cabo los análisis de laboratorio. Asimismo, médicas y médicos de la SEDESA acudieron a los hogares para hacer revisiones físicas a las personas que manifestaron alguna molestia.

Recordó también que desde el 2 de abril se mapeó el perímetro de la zona afectada; posteriormente, el 5 de abril se amplió la realización de pruebas de explosividad a cisternas y tinacos de edificios y domicilios particulares.

Finalmente, este 10 de abril, a la par del cierre del pozo Alfonso XIII, fueron cerradas precautoriamente dos industrias que manejan diversos componentes y sustancias en la zona.

“Lo que se detectó fue una sustancia de la familia de los aceites y lubricantes, y eso es lo que informamos en cuanto tuvimos dicha información. (…) Reitero que vamos a seguir trabajando con la gente, lo que más nos interesa, lo más importante, la prioridad que hemos tenido es la atención de las familias y lo hemos hecho no a distancia, sino directamente en campo con todo nuestro personal, que ha tenido una disposición extraordinaria para este trabajo. Eso es lo fundamental que estamos realizando y que vamos a seguir haciendo”, concluyó.